Un equipo, con participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha identificado en modelos animales y en casos clínicos un gen supresor de tumores. En concreto, el estudio comprueba cómo la presencia del gen AHRR (Represor del Receptor de Hidrocarburos de Arilo) reduce la capacidad de las células tumorales para actuar sobre el organismo. Estas conclusiones sugieren que el AHRR puede constituir una diana terapéutica eficaz para crear nuevos fármacos capaces de frenar el crecimiento de tumores.

El trabajo, que aparece en The Journal Of. Clinical Investigation, se ha desarrollado en varios centros de investigación de EE.UU. y ha contado con la participación del investigador del CSIC Alfredo Martínez, que trabaja en el Instituto Cajal (CSIC), en Madrid. Los autores comprobaron los efectos beneficiosos del gen supresor AHRR en cánceres de pulmón, estómago, colon, mama, testículo, útero y ovario.

Martínez resume las conclusiones del estudio: “Hemos probado in vivo que, cuando se reduce el nivel del gen AHRR en células normales, éstas adquieren características tumorales, mientras que si se aumenta en células tumorales, éstas ven reducida su capacidad de crecer”.

 

Como explica el investigador del CSIC, esta comprobación permite incluir el AHRR dentro del grupo de genes supresores de tumores: “Los genes que controlan el crecimiento celular se pueden agrupar en dos categorías: los aumentan las facetas pro-tumorales de las células favoreciendo el desarrollo del cáncer, mientras que los genes supresores de tumores tienen el efecto contrario”.

En opinión de Martínez, el conocimiento de estos procesos es fundamental para entender cómo se desarrolla el tumor y diseñar nuevos tratamientos: “En situaciones normales, tanto los oncogenes como los supresores actúan en la reparación y mantenimiento del organismo. Sin embargo, cuando hay una activación excesiva de los oncogenes o una reducción de los supresores, comienza a desarrollarse un cáncer”.