El cáncer no es una sola enfermedad, sino un grupo de varias enfermedades. Todas las formas de cáncer hacen que las células del cuerpo cambien y crezcan sin control. La mayoría de las células cancerosas forman una protuberancia llamada tumor. Las células del tumor pueden desprenderse y trasladarse a otras partes del cuerpo. En este nuevo sitio, pueden continuar creciendo y formar más tumores. A este proceso de propagación se le llama metástasis. Cuando el cáncer se propaga a un nuevo sitio, se le sigue llamando por el nombre de la parte del cuerpo en donde se originó. Por ejemplo, si el cáncer del pulmón se propagó a los huesos, sigue llamándose cáncer del pulmón y no cáncer de los huesos.
Algunos tipos de cáncer, como el cáncer de la sangre, no forman un tumor. A este tipo de cáncer se le llama leucemia.
No todos los tumores son cancerosos. Los tumores que no son cancerosos se llaman benignos. Los tumores benignos no crecen ni se propagan como lo hace el cáncer y, generalmente, no ponen en peligro la vida. Otra palabra para canceroso es maligno, por esa razón un tumor canceroso es llamado maligno.

Tener cáncer no siempre significa tener dolor. Que un paciente tenga o no dolor puede depender del tipo de cáncer, de la extensión de la enfermedad y de la tolerancia del paciente al dolor. La mayoría de las veces, el dolor ocurre cuando el cáncer crece y presiona contra los huesos, órganos y nervios. EL dolor puede ser también un efecto secundario del tratamiento. Sin embargo, el dolor puede aliviarse o aminorarse generalmente con medicamentos que requieren receta o con fármacos recomendados por el médico pero que no necesitan receta.Otras formas de reducir el dolor, como son los ejercicios de relajación, pueden también ser útiles. No se debe aceptar el dolor como algo que no se puede evitar por el hecho de tener cáncer. Es importante que los pacientes hablen del dolor para que se tomen las medidas necesarias para ayudar a aliviarlo. El miedo de hacerse adicto o de perder el control no debe impedir que los pacientes tomen medicamentos para el dolor. Los pacientes que toman medicamentos para el dolor causado por el cáncer, según lo ordene el médico, rara vez se hacen adictos a ellos. Además, si el paciente tiene efectos secundarios problemáticos, el cambio de dosis o de tipo de medicamento puede ayudar generalmente.

El fumar y tomar alcohol causa ciertos tipos de cáncer en algunas personas. Estos tipos de cáncer se pueden prevenir evitando el tabaco y el alcohol. Lo mejor sería nunca usar tabaco. Los cigarrillos, los cigarros, las pipas y el tabaco que no se fuma causan cáncer y no deben usarse. Las personas que ya fuman deberían tratar de dejar de fumar. Las personas que fumaban anteriormente tienen menos probabilidades de cáncer que las que continúan fumando.
Las probabilidades de contraer cáncer de la piel se pueden disminuir manteniéndose en la sombra lo más que pueda, usando un sombrero y una camisa cuando salga al sol y utilizando protector solar.
Sabemos que nuestra dieta (lo que comemos) tiene conexión con ciertos tipos de cáncer, aunque las razones exactas no están muy claras todavía. El mejor consejo es comer mucha fruta fresca, ensaladas, verduras y granos integrales como pasta y pan, y disminuir los alimentos altos en grasa.
Hay pruebas de laboratorio, llamadas pruebas de detección, que los adultos deben hacerse para que así se pueda detectar tempranamente el cáncer. El cáncer se puede curar con frecuencia si se detecta a tiempo.

En el pasado, las personas a menudo se mantenían alejadas de alguien con cáncer, porque tenían miedo de «contagiarse». Pero el cáncer no es como la influenza (gripe) o un resfriado; no puede «contagiarse» de alguien que ya lo tiene. Usted no se contagiará de cáncer si permanece cerca o toca a alguien con cáncer. No tenga miedo de visitar a alguien con cáncer; ellos necesitan su apoyo y el de sus familiares y amistades.

Algunos tipos de cáncer son ocasionados por los hábitos de las personas. El fumar puede causar cáncer del pulmón, la boca, la garganta, la vejiga, del riñón y de algunos otros órganos, así como enfermedades cardíacas y derrame cerebral. Aunque no todas las personas que fuman contraen cáncer, el fumar aumenta la probabilidad de que la persona contraiga la enfermedad. También se ha demostrado que el tomar mucho alcohol aumenta las probabilidades de una persona de contraer cáncer de la boca, de la garganta y de algunos otros órganos. Esto es especialmente cierto si la persona toma y fuma.
La radiación (rayos X) puede causar cáncer, pero los rayos X utilizados por el médico o el dentista no son peligrosos. Demasiada exposición a los rayos solares sin protección puede causar cáncer de la piel.
En muchos casos, la causa principal del cáncer continúa siendo un misterio.
Sabemos que ciertos cambios en nuestras células ocasionan que el cáncer se origine, pero aún no sabemos exactamente cómo sucede. Muchos científicos están estudiando este asunto.